MUJERES ¡AJÁ!
Tejiendo sueños a través de un emprendimiento con alma
por: Mónica Luján
Conoce la historia detrás de un emprendimiento que valora el trabajo de manos artesanas que tejen prendas sustentables y modernas. Paola Dávila y Lelvinnova Londoño nos cuentan sobre su emprendimiento, su visión y la experiencia con el trabajo artesanal en Monalpaca

Tradicionalmente, Bolivia siempre ha estado arraigada al tejido y a la confección, pero con el paso de los años estas técnicas artesanales comenzaron a desaparecer. Afortunadamente, en el último tiempo hay una consciencia por revalorizar la riqueza de “lo hecho a mano’’. Paola Dávila y Lelvinnova Londoño han emprendido un negocio con un alto grado de sensibilidad social y que justamente valora el trabajo hecho a mano. Se trata de Monalpaca un proyecto que tiene como objetivo generar empleo y contribuir a la reducción de la pobreza al incorporar como proveedoras a grupos organizados de mujeres de bajos ingresos, que viven en zonas rurales y periurbanas del Municipio de La Paz.
Los tejidos son trabajados por mujeres que aportan a sus familias y se sustentan económicamente gracias a este oficio. Entonces, apostar por una empresa que además de aportar a una cadena de trabajo busca conservar una tradición como esta, significa sumar a la sociedad y su desarrollo.
Paola y Lelvinnova nos cuentan los detalles de este lindo emprendimiento.
¿Cómo nace este proyecto?
Monalpaca surge de la admiración que sentimos ambas por la habilidad de las mujeres bolivianas para tejer. Ese fue el punto en el que coincidimos al principio. Luego las circunstancias particulares que cada una estaba viviendo en el 2017, sumado al deseo de emprender nos unieron en este proyecto. Lelvin tenía experiencia en el trabajo con mujeres de la cadena de valor de la alpaca y yo siempre me he interesado por la moda y la innovación. Entonces unimos nuestras ideas que se complementaban muy bien y fue así como concretamos al constituirnos como una empresa
¿Cuál es el aporte de este proyecto?
Tenemos un alto grado de sensibilidad social, sabemos que, del bienestar de nuestras productoras, dependerá la calidad de su producción. Para esto queremos ser reconocidas como una empresa que cambia vidas y estamos buscando colaboraciones con otras organizaciones para llevar a cabo un programa de empoderamiento económico y de mejoramiento de capacidades para todas las mujeres que hacen parte de nuestras unidades productivas.
¿Por qué la Alpaca?
La fibra de Alpaca y de otros camélidos como la Llama y la Vicuña, son materiales orgánicos renovables, 100% biodegradables y, por lo tanto, respetuosos del medio ambiente. Nos interesan, además, porque son materiales muy versátiles, suaves, ligeros, resistentes y de gran adaptabilidad a la temperatura corporal.
¿Qué las distingue de otras producciones que hay en el mercado en este rubro?
Nos distinguimos o diferenciamos de otras producciones en este rubro, justamente porque estamos buscando otro tipo de mercados. Es decir, queremos posicionar nuestros productos en mercados internacionales inclusivos. Queremos posicionarnos a nivel internacional en el mercado de comercio justo, como una empresa reconocida por su alta calidad, innovación y variedad de sus productos.
¿Están exportando?
Si, nuestros productos son para la exportación. Por ahora hemos enviado en pequeña escala a países como Colombia, Francia, USA y Canadá.
¿Cómo logran un equilibrio entre su vida profesional con la de mujer y madre?
Conciliar la vida laborar y el ámbito familiar, siempre será un reto para cualquier mujer. Afortunadamente, contamos con el apoyo de nuestras familias. Esto quiere decir que tanto esposos como hijos participan de manera corresponsable de las actividades domésticas y familiares permitiéndonos por ejemplo viajar o ausentarnos de la casa cuando es necesario.
¿Qué les gustaría decir a las mujeres lectoras de nuestra revista para que se animen a emprender?
Si rompemos con los miedos que nos detienen y damos un paso al frente presentando nuestra idea con innovación y convicción seguramente encontraremos eco en alguien que justamente estaba buscando o necesitando lo que tenemos para ofrecer
» Emprender requiere primero que todo el creer en nosotras mismas. Para empezar, tenemos que dejar de creer que nuestras ideas no valen la pena o que no son interesantes»


